HUMANIDAD ES SENTIR EMPATÍA, COMPRENSIÓN Y SOLIDARIDAD

Con una crisis migratoria en pleno desarrollo; en donde el gobierno destaca por su lentitud; incapaz de anticiparse y sin planificación; con la brújula perdida y hoy ocupado en defender al presidente tras las vergonzosas revelaciones de los “Pandora Papers”, comenzamos así el décimo mes del año.

El fin de semana nos enteramos del nombramiento del nuevo Director de Migración para la Región de Antofagasta, Richard Bórquez. Lo primero que quiero señalar es que todas las atribuciones que se le están entregando a este cargo nuevo, están hoy día vigentes y son por ley atribuciones de los Delegados Presidenciales, entonces el apurar este nombramiento es un poco asumir que los representantes del presidente han sido incapaces asumir estas tareas que son de ellos en forma innata.

Es preciso señalar que al señor Bórquez no lo conozco y estoy disponible para prestar toda la colaboración que él quiera aceptar. En este sentido, creo que éste nuevo funcionario tenga una mirada mucho más y holística y participativa, incorporando a los gobiernos locales, con una impronta regional a la hora de abordar la crisis migratoria, con un trato humanitario a quienes transitan por la región, prestando las mínimas condiciones sanitarias, de alimentación para niños, mujeres embarazadas y adultos mayores que puedan estar en este tránsito.

Dicho lo anterior, todo este tiempo el Ministerio del Interior estuvo eludiendo su responsabilidad, respecto de dictar los reglamentos, para una correcta aplicación ahora que está dictada la Ley Migratoria o de hacer las modificaciones que corresponda; también ocuparse de la política de frontera; de relaciones exteriores; de seguridad pública y seguridad interior del Estado; entonces era inexplicable la actitud de los delegados presidenciales que no hicieron nada para hacerse cargo y conducir una respuesta adecuada.

Ya firmé la solicitud de interpelación al Ministro del Interior, Rodrigo Delgado, espero responda las preguntas y que no tome la actitud de otros personeros, que han contestado lo que ellos quieren sin referirse a las preguntas que se le hacen, así no encontraremos soluciones, lo peor que nos puede pasar es normalizar el que estas personas estén sin acceso a agua potable; que se les destruya su documentación y las pocas pertenencias que tienen; normalizar que se quemen los juguetes a los niños es de una sociedad desalmada y aceptar vivir en el horror.